En la última década, la industria de entretenimiento para adultos en Colombia ha experimentado un crecimiento notable, impulsado principalmente por el auge de los estudios webcam.
Estos establecimientos son esenciales para que los y las modelos desarrollen sus transmisiones de manera segura y eficiente, sin embargo, a pesar de su funcionalidad y contribución a la economía nacional, algunos estudios operan desde la clandestinidad, lo que juega en contra de nuestdros principios, que son: la formalización y profesionalización de la industria. Es esencial abordar esta situación y promover la formalización de estos estudios por varias razones fundamentales.
En primer lugar, la formalización de los estudios webcam en Colombia brindaría una mayor protección a los modelos, monitores, mánager y demás personas que hacen parte de la cadena de valor.
La ausencia de regulaciones claras deja a los modelos expuestos a prácticas injustas por parte de los estudios, que pueden retener ingresos injustamente, imponer horarios o ignorar sus necesidades de seguridad y bienestar. Al formalizar la industria, se establecen normas adecuadas que protejan los derechos de los trabajadores y promuevan un ambiente seguro y justo.
Además, la formalización de los estudios webcam tiene un impacto positivo en la economía colombiana. Estos estudios representan una fuente significativa de ingresos para muchas personas en el país, y su contribución al producto interno bruto (PIB) no debe pasarse por alto. Sin embargo, la falta de formalización dificulta la recolección de impuestos y la regulación de la actividad económica en este sector. Al regularizar la industria, el gobierno podría implementar mecanismos para garantizar que se paguen impuestos justos y que se contribuya
al desarrollo económico del país de manera transparente y equitativa.
Otro aspecto crucial a considerar es la protección de los derechos y la dignidad de los y las creadoras de contenido adultos. La estigmatización social y la discriminación hacia quienes trabajan en la industria son comunes, lo que puede tener consecuencias devastadoras para la salud mental y emocional de los modelos. La formalización de la industria promueve una mayor conciencia y aceptación de esta forma de trabajo, desafiando los estereotipos negativos y fomentando una cultura de respeto y dignidad para todos los individuos, independientemente de su ocupación.
Además, la formalización de los estudios webcam también beneficiaría a los usuarios y consumidores al garantizar estándares de calidad y seguridad en las plataformas en línea. La falta de regulación puede llevar a situaciones en las que los usuarios sean víctimas de fraudes o abusos por parte de estudios poco éticos. Al establecer normativas claras y supervisar la actividad de los estudios, se puede proteger a los consumidores y promover una experiencia más segura y satisfactoria para todos los involucrados.
En resumen, la formalización de los estudios webcam en Colombia es fundamental para garantizar la protección de los derechos humanos, promover el desarrollo económico y social, y desafiar la estigmatización asociada con esta profesión. Al implementar regulaciones claras y promover una cultura de respeto y dignidad para todos los involucrados, el país puede avanzar hacia un futuro más justo y equitativo para quienes trabajamos en esta industria. Es hora de que Colombia reconozca y aborde esta realidad de manera responsable y comprometida.